Una forma diferente de mirar el mundo...

Cerramos con postigos las ventanas de nuestras mentes.
Encerramos y sometimos a los pensamientos de mil formas diferentes.
Y ellos encontraron una alternativa para brotar libres.-

domingo, 4 de enero de 2009

Navidad



La navidad se ha convertido en una especie de carrera jalonada por miles y millones de cenas, festejos y copas. Es la pasarela idónea para alardear de todo lo que se tiene y de todo lo que no se carece.

Las buenas intenciones, que nunca faltan, se sacian con algún que otro buen acto que consigue relajar nuestra falta total de conciencia. Pero en navidad creemos que poseemos conciencia, creemos que somos buenos y se nos salta la lágrima fácil cuando vemos por la tele toda la desdicha, tragedia, pobreza, hambre y desesperación. Cuando estas imágenes consiguen conmovernos entonces pensamos que somos buenos y gozamos de un instante de respiro, de coger aire para seguir compitiendo en la carrera de las fiestas, los regalos inútiles, el derroche por el derroche y el "a ver quién pone más comida" en las tradicionales fiestas del despilfarro y la gula.

Que nadie se engañe, las teles disfrutan poniéndonos esas imágenes de "lo peor" del año, verdaderas tragedias humanas que nos muestran con toda clase de detalle y con una extraña e irónica perversidad definida por mostrar el escenario más macabro mientras el televidente se atiborra como un cerdo. Y cuanta más tremenda es la realidad tamizada por la pantalla de nuestro televisor, más y más audiencia tiene el programa en cuestión.

En fin, navidad, dulce navidad.

2 comentarios:

Celia Merino dijo...

Laura, feliz año y mucha suerte.

Salud.

Laura dijo...

Hola Celia, muchas gracias. Te deseo un gran año y sobre todo muchas salud para disfrutarlo. Es una alegría saber de tí. Un abrazo.